Mediterráneamente

Mediterráneamente amanece.
Cuando te veo levantar cada día.
Envuelto en salado y dulce oleaje,
Que me irradia su paz y armonía.

Mediterráneamente te deseo.
Cuando te veo suspirar cada día.
Envuelto de salado y dulce brebaje,
Que me sumerges en amor y alegría.

Mediterráneamente anochece.
Cuando deseo soñar cada día.
Envuelto de sal y dulce homenaje,
Que te regalo en forma de poesía:

"Porque mediterráneamente sin ti,
Mujer de dulce mar, 
Una gota salada sería". 

Manuel.

Privet!

Nunca dices no, siempre digo si.
Si a tus azules ojos brillando en mí.
Nunca digas no, siempre diré si.
Si a tu suave pelo enredado en mí.

Ven conmigo y dime que es posible. 
Con tus labios rojos unidos a los míos.
Que iré contigo y diré que es posible. 
De tus finos brazos sujetos a los míos.

Nunca digas no y siempre dime sí. 
Un pequeño cuerpo el que nació de ti. 
Nunca dices no, siempre te diré si 
Es tu corazón el que me enamoró de ti.

Manuel.
Para Natalí.


"Incompleto" de Patri.

Los Amantes.

Atrapado entre tus labios,
Soy esclavo de tu cuerpo.
Cerrojos son tus brazos.
El deseo es mi tormento.

Tomaste el control del tiempo,
Como el hada buena del cuento,
Retrasando el reloj del lamento,
Sin dejarme caer un momento.

Vivimos en nuestro castillo de arena,
Bajo el influjo de las agitadas mareas,
Que nos envidian sin poder arrastrarnos,
Dejando a su paso 2 amantes mojados.

Manuel. 

Amor Desafinado.


Déjame que en tu oído silbe,
Que soy un delfín enamorado.
Ahora que la mar lo prohíbe.
Un hilo de amor desesperado.

Déjame que te arrulle el pelo,
Que soy un gato despistado.
Ahora que el ratón está reo,
Un bufido de amor liberado.

Déjame cobijarme en tu pecho,
Que soy un lobo abandonado.
Ahora que el pastor es cegado,
En un aullido al Sol satisfecho. 

Manuel. 

Soñaba con Madrid.


Soñabas tú mientras viajabas y con tus ojos cansados hacías el camino. 

Y de repente...

Una mariposa se coló ante la mirada de los viajeros sorprendidos.

Era una mariposa de color rojo con siete estrellas pintadas.

Que se posaba en cada asiento revoloteando sus inquietas alas.

Quiso la corriente...

Que Las siete estrellas cayeran del cielo:


Despertando de polvo tus ojos dormidos.

"Atocha" nos anunciaron ...

El viaje había concluido.

Manuel.

Un Nuevo Año.

Despereza el nuevo día.
Amanece con su mirada.
Es tan joven y tan bella.
Que no pienso en nada.

Permíteme que sonría,
Mi preciosa doncella.
Brindando por la vida,
De amor a ti entregada.

A solas sin ti soñaría:
Con sentir tu piel cálida,
Tu pecho de almohada,
Si duermo es con ella.

Ya no maldigo a la vida.
Renazco con su mirada.
Con letras de voz cálida,
Si escribo es para ella.

Manuel.